Construida con 61 troncos de abeto Douglas, esta capilla diseñada por John Pawson está situada en Baviera (Alemania).
Un pequeño sendero que se desvía de los senderos principales conduce a su entrada. La capilla hecha con troncos de abeto Douglas se encuentra en una colina en la cúspide del bosque. Tiene vistas panorámicas del paisaje de Suabia y la aldea de Unterliezheim.
El objetivo es que la gente identifique la capilla de madera como algo que forma parte del lugar, no como una obra de arquitectura convencional. Así, la estructura adquiere una forma sencilla, parece a simple vista, una pila de troncos.
El interior conserva esta sencillez. Por eso los niveles de luz son deliberadamente bajos. Una abertura en forma de cruz, otra alargada cerca del techo, una ventana, y la puerta de acceso son las únicas fuentes de luz natural. Los más de siete metros de altura y casi nueve metros de largo agudizan la sensación de estrechez.
La madera solo ha sido minimamente intervenida en el exterior, para su conservación. El tiempo y el clima contribuirán a un proceso de cambio físico continuo. La estructura llevará a perpetuidad una memoria poderosa del bosque del cual se formó.